miércoles, 9 de marzo de 2011

Empleo y Economía Social



Hace unos días se publicaron los datos sobre el desempleo en Ávila. Las noticias no han sido nada halagüeñas, en nuestra provincia el incremento del paro es el tercero más alto del país.
Quienes tenemos alguna responsabilidad en el ámbito de los recursos humanos o, como prefiero, en la Gestión de Personas, también comprobamos día a día otro dato negativo: cada vez llegan a nuestros despachos más profesionales altamente cualificados, bien por su experiencia y conocimientos en una materia determinada, bien por su formación, que están dispuestos a trabajar “en lo que sea”. Así, ingenieros, informáticos, periodistas, expertos de la construcción, electricistas y otros trabajadores se acercan a dejar su currículum vítae solicitando un puesto de trabajo sin importarles qué tareas o competencias se exijan para desempeñarlo.
Con este panorama, las empresas de la denominada Economía Social, entre las que se encuentran las asociaciones de discapacidad, se han convertido en uno de los pilares más importantes para el mantenimiento y la creación de empleo estable; no en vano, según los últimos estudios, el 10% del empleo en España lo genera esa Economía Social, estimándose que se superan los dos millones de empleos los generados en este ámbito, entre empleos directos e indirectos. Estos datos los podemos también trasladar, en su justa proporción, a nuestro entorno más cercano, donde las organizaciones sociales abulenses, con la colaboración y apoyo de las administraciones y otras entidades, trabajan para estabilizar los puestos de trabajo y, en muchos casos, generar otros a través de la oferta de nuevos servicios que no solo ofrezcan recursos a los más necesitados, sino que también ofrezcan nuevas oportunidades profesionales.
Por todo ello, entiendo que la exigencia de profesionalización de estas entidades debe ser mayor, así como la incorporación en sus procesos de gestión de personas de nuevos modelos que favorezcan el desarrollo profesional y personal y, por extensión, redunden en una mejor calidad de vida laboral.
Algunos estamos intentándolo.
¡¡BUENOS DÍAS ÁVILA!!
Jaime Rodríguez

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