martes, 1 de marzo de 2011

Libertad de Educación



Buenos días, Ávila
         Al igual que bastantes abulenses, algunos de mis amigos están ahora un poco inquietos y preocupados porque tienen que elegir el Centro educativo al que llevarán a sus hijos.
         Como es algo que se repite todos los años por estas fechas conviene dejar claro algunas consideraciones:
         El hombre es un ser intrínsecamente social y dependiente. Sobre todo en los años de infancia y juventud. Por eso debe recibir una educación, crecer en sociedad, adquirir una cultura y unos conocimientos y poner en práctica lo recibido para desarrollarse integralmente.
         Por eso van íntimamente unidos los hijos y la educación. Esta es una prolongación y complemento obligatorio de la obra generativa. Por eso el derecho a la educación está fundamentado en la propia naturaleza humana.
         El derecho de los hijos se corresponde con el derecho-deber de los padres a educarlos. El derecho a educar y ser educados no dependen ni puede depender de lo que esté recogido en una norma, ni es una concesión de la sociedad o del estado. Sino que es un derecho primario y natural. Los padres son los primeros y principales educadores y, además, son educadores por ser padres.
         Ni los padres pueden renunciar a ser educadores ni el Estado asumir el derecho que no le corresponde. Por eso hay que dejar claro que cualquier otro agente educativo que no sean los padres, lo es por delegación de estos y, siempre, subordinado a ellos.
         Por eso la escuela debe ser vista por todos como colaboradora en la labor educadora, un instrumento de la propia tarea como padres.
         El estado debe, por tanto, salvaguardar, promover y potenciar la libertad de las familias para que estas puedan elegir los centros Educativos que crean más convenientes para educar con ellos a sus hijos. El Estado nunca deberá usurpar ese derecho primario y natural a los padres y mucho menos a los hijos por ninguna razón social, económica, ideológica o política ya que esta estaría siempre por debajo de ese derecho.
Javier Hernández Varas

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